24/9- 17/10 2021
Museo Francisco Sobrino | Guadalajara | España
La muestra se compone de 35 obras fechadas entre 1949 y 1982 procedentes de dos colecciones privadas: la Colección Ars Citerior de la Comunidad Valenciana y la madrileña Colección espíritu – materia. Muchas de la obras expuestas son totalmente inéditas, desconocidas al público y ajenas a las publicaciones y exposiciones del artista.
Eusebio Sempere (Onil, Alicante, 1923-1985) es una de las figuras más significativas del arte español del siglo XX, que comparte escenarios e ideas del arte cinético y se caracteriza por una poética basada en la luz y el color; como escribió el crítico de arte y ensayista Vicente Aguilera Cerni, el suyo: “es un arte a la vez concreto, poético, lógico e incluso, urbanístico”. La muestra reúne alrededor de 170 obras: acuarelas, gouaches, relieves luminosos, collages, pinturas, móviles, esculturas y proyectos interdisciplinares, además de un apartado documental que abarca desde 1949 a principios de la década de 1980. En la trayectoria artística de Sempere su larga estancia en París durante la década de los cincuenta marca un punto de inflexión. Allí participa en varias ediciones del Salon des réalités nouvelles, donde en el verano de 1955 expone sus relieves luminosos móviles y un manifiesto en el que se refiere a la luz como el elemento con el que construir un diálogo poético a través del tiempo. El mismo año de la presentación de estas obras claramente cinéticas, había tenido lugar la exposición Le mouvement en la galería Denise René, considerada el origen del arte óptico y cinético. Su progresivo interés por el arte de vanguardia en España y las dificultades de la vida en París, llevan a Sempere a instalarse en Madrid en enero de 1960, en pleno auge del informalismo. Como integrante del Grupo Parpalló expone ese año en la Primera exposición conjunta de arte normativo español y tiene en el mencionado Aguilera Cerni uno de sus primeros apoyos; participa también en la XXX Bienal de Venecia (1960) y en la VI Bienal de São Paulo (1961); en 1963, con una beca de la Fundación Ford, viaja por Estados Unidos, exponiendo en 1964 y 1966 en la galería Bertha Schaefer de Nueva York. Durante esos años, la Galería Juana Mordó le representa y le dedica una muestra retrospectiva en 1965; Fernando Zóbel le incluye en la inauguración del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, en 1966.
Ars Citerior es una colección familiar que empezó a formarse con obra gráfica de pintores de la generación de Eusebio Sempere, siendo su serigrafísta, Abel Martín, el que comenzó a conservar para sí algunos de los ejemplares que estampaba para autores como Chillida, Barjola, Rueda o Saura… Con el paso de los años fue agrupando obra original única de aquellos pintores amigos, además de obra de Sempere, también de Millares, Torner, Salvador Victoria o Zóbel. A su muerte en 1993, estas obras pasaron a sus herederos, durante unos años hasta 1999, este grupo de obras, en unos casos son transmitidas o vendidas a otros familiares de Martín. Es a partir de este año en el que se consigue ir agrupando parte de ellas y se plantea entre varios miembros de la familia aumentar la colección en la medida de lo posible y formar un cuerpo coherente en el que además de intentar llenar los huecos con piezas de otras épocas anteriores, se van adquiriendo obras actuales, de varios de los artistas nacidos en los años veinte y treinta.
La Colección espíritu – materia está integrada por obras de artistas españoles de la segundamitad del siglo XX, pero, lejos de pretender ser un repertorio exhaustivo del arte de las últimas décadas, opta por representar muy ampliamente solo a algunos creadores, cuya específica intensidad espiritual y/o matérica da nombre a la colección.