8/9 – 30/9 2023
Curator | Maite Bäckman
Sporting Club Ruzafa | Valencia | España
“A primera vista aquello no tenía fin. La amalgama de formas geométricas se proyectaba hasta un horizonte orientado hacia el norte. Bajo fondos anaranjados, encarnados, azulados, índigos, pero todas formas iguales, impávidas, como si existieran allí desde el principio de los tiempos. Tú intentabas buscar algún detalle que las diferenciara, desde una grieta insolente fruto del tiempo o de una mala reforma, a una ristra de luces navideñas olvidadas allí miles de años atrás, o a una pareja de amantes asomados a una de sus azoteas, razonando acerca del tiempo que les quedaba antes de volver al resto de su vida. Y al final meneabas la cabeza, como hacemos cuando nos damos cuenta que el tiempo perdido nunca fue nuestro. Realmente la única cosa diferente en aquel paisaje clónico eras tú. Y tu mirada.”
Ángel Pontones
Fernando Barrué de la Barrera, nacido en Valencia en 1965, es un destacado pintor cuya carrera artística se encuentra íntimamente ligada a la técnica del frottage. A lo largo de más de tres décadas, esta técnica ha influido de manera fundamental en su producción artística, definiendo su estilo distintivo y su enfoque creativo.
A diferencia de los métodos tradicionales que emplean pinceles, Barrué ha adoptado rasquetas con perfil de goma, comúnmente utilizadas en serigrafía, como sus herramientas preferidas en su proceso creativo. Con estas rasquetas, logra que los cartones previamente manipulados y utilizados como matrices dejen una huella de estructuras geométricas en la tela. Sin embargo, su enfoque en la geometría no busca la perfección, sino que abraza los accidentes y las presencias imprevistas que surgen en el proceso gestual de arrastrar la pintura sobre la tela.
Este proceso artístico único da lugar a la aparición de arrugas, arañazos y texturas que, lejos de ser considerados defectos, enriquecen sus obras de arte. En palabras del propio Barrué: “Este barrido pictórico conlleva la aparición de imperfecciones, arañazos o texturas que enriquecen el motivo elegido, y evitan que el cuadro tenga un acabado industrial.”